Estamos pasando por días de incertidumbre y preocupación con una nueva pandemia declarada por la OMS: la COVID-19 causada por un coronavirus, que se extiende por todo el mundo a un ritmo realmente rápido y que hace que nos preguntemos si el coronavirus podría afectar a nuestros perros.
Recuerda que no se trata ni de creer que este es el fin del mundo, ni de pensar que no pasa nada.
Por eso, como creemos que la verdadera prevención es informarse y hacerlo con fuentes fidedignas, hoy escribimos este artículo basado en la información científica disponible y centrándonos sobre todo, en cómo esta enfermedad podría afectar a nuestros fieles amigos.
Sin más rodeos, comencemos entonces.
Índice
- 1 Coronavirus, SARS-CoV-2 y COVID-19: ¿Qué diferencia hay?
- 2 Podría SARS-CoV-2 infectar a nuestros perros?
- 3 ¿Podría tener mi perro COVID-19?
- 4 ¿Se ha descrito algún caso de COVID-19 en perros?
- 5 SARS-Cov-2: ¿Podría contagiar a nuestros perros en el futuro?
- 6 ¿Cómo debemos proteger a nuestro perro frente al coronavirus?
- 7 Coronavirus canino (CCoV): características, síntomas y tratamiento.
- 8 Coronavirus Respiratorio Canino (CRCoV)
- 9 Conclusiones.
Antes de meternos de lleno en la posibilidad de contagio de esta enfermedad para nuestros peludos camaradas, es importante que aclaremos todos los términos alrededor del Coronavirus.
Los coronavirus son una familia de virus, denominados de esa manera por unas protuberancias que tienen en su superficie y que al microscopio electrónico asemejan a una corona.
Esta familia se encuentra entre nosotros desde hace mucho tiempo causando enfermedades de distinta gravedad, como el resfriado común donde curiosamente son de los virus más débiles que lo causan.
Como ya nos hemos enfrentado anteriormente a estos miembros de la familia de coronavirus, existe lo que se llama inmunidad grupal: sujetos ya curados que son inmunes, en la población general, hacen que el virus no pueda propagarse tanto.
Ahora bien, en Diciembre de 2019, en Wuhan, China, un virus miembro de la familia de los coronavirus mutó. Esta mutación le permitió pasar de otra especie animal (posiblemente pangolin o murciélago) a la humana convirtiéndose en un nuevo virus al cual nuestro cuerpo no se había enfrentado antes. A este nuevo virus se denominó SARS-CoV-2
Hay que recordar que esta no es la primera vez que algo así sucede, puesto que en 2002 surgió el virus del SARS y en 2012 el del MERS, ambos miembros de la familia de los coronavirus
¿Qué es el SARS-CoV-2?
El SARS-CoV-2 (por Severe Acute Respiratory Syndrome Coronavirus - 2) es un virus miembro de la familia de los Coronavirus que a finales de 2019 mutó en la región de Wuhan en China y pasó de infectar solo especies animales (probablemente murciélagos o pangolines) a infectar a humanos.
El virus se caracteriza por su alta propagación debido a un periodo muy prolongado en el que no provoca síntomas pero en el que se contagia.
A la enfermedad causada por el SARS-CoV-2 se les ha denominado COVID-19
COVID-19: Lo que debes saber.
Se denomina COVID-19 por (por Coronavirus Disease 2019) a la enfermedad que desarrollamos los humanos como consecuencia de la infección con el virus SARS-CoV-2
Los síntomas de esta enfermedad son:
- Fiebre - 89%
- Tos Seca - 68%
- Fatiga - 38%
Otros síntomas que se pueden presentar son: mucosidad, dificultad para respirar, dolores musculares o de cabeza, escalofríos y otros.
- El COVID-19 es una de las nuevas epidemias de menor índice de mortalidad. Hasta el momento, se estima entre un 0.7-3% de los infectados acaba muriendo. Pensemos en otras epidemias recientes y comparemos:
- Ebola (1976) 40.6%
- Gripe aviar H5N1 (1997) 52.8%
- Gripe H7N9 (2003) 39,3%
- SARS (2002) 9.6%
- MERS (2012) 34.4%
- También hay que matizar que la mayoría de las muertes se producen entre pacientes de avanzada edad o con una enfermedad preexistente como se puede ver en el siguiente gráfico.
- Su gravedad principal radica en la rapidez con la que se extiende por el mundo, colapsando los sistemas médicos antes de que podamos disponer de una vacuna o de medios para luchar contra ella .
- Si se extendiera a un ritmo menor, se podría prevenir el caos causado en el sistema hospitalario y ganaríamos tiempo para luchar contra la enfermedad
¿Qué debemos concluir entonces? Que el principal camino de acción no es la preocupación y el pánico, sino la prevención.
En el momento actual el distanciamiento social es el mejor modo de prevenir la expansión de esta enfermedad.
A largo plazo, todos aquellos individuos que superen la enfermedad, incluso los que no la hayan detectado por padecer síntomas vagos, serán inmunes.
Además, cuando se disponga de una vacuna, todos los individuos sanos que sean vacunados también serán inmunes y desarrollaremos de nuevo una inmunidad de grupo que hará al SARS-CoV-2 un virus mucho menos peligroso
Por otro lado, es muy posible que el virus se vaya atenuando como ha pasado con el del SARS
Podría SARS-CoV-2 infectar a nuestros perros?
Muy improbablemente.
La puerta de entrada a una célula varía mucho de una especie animal a otra y por tanto es muy improbable que el mismo virus pueda infectar dos especies distintas
Digamos que cada especie animal tiene una llave de entrada distinta y resulta muy improbable que la llave que porta el virus le sirva para entrar en varias especies.
Cuanto más distancia genética haya entre nuestra mascota y nosotros, más improbable sería el contagio, es decir, otros mamíferos más próximos genéticamente a nosotros como los simios si serían mas susceptibles al SARS-CoV-2 que otros animales como los perros o aun mas, que las aves
Dicho esto y aunque no sea frecuente que un mismo virus pueda infectar distintas especies, aunque raro, si es algo que ocurre.
¿Podría tener mi perro COVID-19?
Como hemos explicado, cada especie animal tiene una puerta de entrada distinta a la que el virus tiene que adaptarse y lo mismo sucede para su propagación dentro de lso distintos organismos.
Por tanto, los síntomas de una enfermedad dependen mucho de la especie que los sufre. Esto quiere decir que aunque en algún momento los perros se infectaran de SARS-CoV-2 o alguna mutación de este virus, los síntomas y la gravedad de su enfermedad podrían variar mucho
es posible que en la especie canina no se manifiesten síntomas o que que los síntomas sean distintos o de una gravedad diferente. Un ejemplo de esto es el concepto de “especie portadora” en el cual una especie animal puede contagiar una enfermedad mortal para otra especie pero sin ni siquiera padecerla.
Al mismo tiempo el posible tratamiento de esta enfermedad en perros podría ser distinto al de humanos.
¿Se ha descrito algún caso de COVID-19 en perros?
No hay registros de casos que reporten COVID-19 en caninos, sólo un testimonio sobre una posible transferencia del virus del SARS-CoV-2 de un humano a un perro en Hong Kong los primeros días de Marzo de 2020. Sin embargo, el perro dio solo un leve positivo que debe confirmarse. La OMS indicó que no se podría transmitir de humanos a animales o viceversa.
SARS-Cov-2: ¿Podría contagiar a nuestros perros en el futuro?
Como hemos dicho arriba, aún no hay motivo por el que pensar que nuestros perros están en riesgo. A día de hoy sería casi imposible y en el futuro sólo podría suceder en caso de que el virus sufriera una mutación nueva que le haga susceptible a la especie canina.
Del mismo modo que es muy improbable que un virus pasase de animales a humanos, lo es que pase de humanos a animales.
Como hemos dicho, los perros no son susceptibles a la enfermedad pero sí que pueden sufrir sus consecuencias si sus dueños enferman por ello en primer lugar debemos protegernos a nosotros mismos
Como consecuencia de las medidas tomadas por los distintas autoridades forzando al aislamiento social, debemos asegurarnos de que disponemos de suficiente comida para nuestro animal por un periodo de tiempo razonable
Por otro lado, si hemos dado positivo parla el test de Coronavirus o tenemos síntomas más que compatibles con la enfermedad, sería adecuado reducir la exposición de nuestro perro a nuestras secreciones, sobre todo secreciones de saliva y mocos. Sólo por prevención.
Estamos tranquilos entonces, que el SARS-CoV-2 no afecta a perros, pero si hay un pariente de este virus, otro coronavirus que, sí puede enfermarlos. Se trata del coronavirus canino (CCoV).
Estos virus son, en general, menos nocivos, afectando gravemente únicamente a cachorros de menos de 6 meses. En estos casos, sí pueden llevarlos a la muerte, pero en perros más grandes no.
Frecuentemente, el virus se aloja en el intestino generando problemas gastrointestinales, que raramente son graves a no se ser que se produzca en conjunto con Parvovirosis.
Los síntomas que pueden presentarse son:
- Problemas gastrointestinales como diarrea (a veces con sangre o mocos).
- Fiebre.
- Inapetencia.
- Temblores,
- Letargo.
- Vómitos
- Dolor abdominal.
Ante estos síntomas, visita rápidamente a tu veterinario. Si bien es tratable, puede complicarse con otras patologías, ya que el perro baja sus defensas y, en ese caso, puede ser más nocivo.
¿Cómo se contagia?
En general se contagia mediante las heces, por lo que los perros que huelen o comen el popo de otros perros corren más riesgo.
La enfermedad no se contagia de perros a personas, pero si puede pasar de perros a gatos.
¿Cuál es su tratamiento?
Como dijimos, se trata de un virus que solo afecta a perros (también existe el felino) y que no suele ser grave, salvo que enferme a cachorros.
El tratamiento es principalmente para contener la diarrea y en casos avanzados puede ser necesaria la hidratación intravenosa.
Puede prevenirse mediante la vacunación. También es recomendable a modo de prevención suministrar probióticos y prebióticos.
Recientemente se ha descrito otro coronavirus en perros y es conocido como el Coronavirus respiratorio Canino (CRCoV) (por Canine Respiratory Coronavirus)
Se identifico en el Reino Unido en 2003 en muestras de pulmón de perro y también se ha encontrado en otros países de hecho, el 50% de los perros testados en EEUU y Canada muestran anticuerpos para este virus (es decir, han estado infectados por el en algún momento)
Este virus esta más relacionado con el virus del catarro común que con el Coronavirus canino (CCoV) y puede provocar una infección respiratoria aguda. Su contagio se produce por contacto directo entre perros.
Sus síntomas son tos, estornudos y mucosidad
No hay tratamiento antiviral especifico para esta enfermedad pero sí puede ser necesario el uso de antibióticos para tratar infecciones bacterianas secundarias.
Conclusiones.
No existe al momento ningún indicio de que nuestros perros puedan correr riesgo de infección frente al SARS-CoV-2, este miembro de la familia coronavirus que causa la COVID-19. Sin embargo los perros sí pueden ser infectados con otros tipo de coronavirus, el canino que, en general, no es tan nocivos en perros grandes pero pueden ser peligroso en cachorros.
De todos modos, como el coronavirus de Wuhan está aún expandiéndose y puede mutar, estar atentos a la evolución de casos en mascotas, será crucial, siempre tomando información de fuentes serias como la OMS u organismos similares.
La mejor manera de evitar que esta enfermedad afecte a tu mascota es evitando que te afecte a ti. Evita lugares donde pueda haber multitudes, lávate bien las manos, y practica el distanciamiento social.
No olvides disponer de reservas de comida para tu perro para unos cuantos meses por lo que pueda pasar.
Recuerda que si nos cuidamos nosotros, también estamos cuidando a nuestra mascota. La información y la prevención son nuestras herramientas para lograrlo. Sin pánico pero con acción. ¡A cuidarse!
Recursos y lectura adicional.
- Mapa coronavirus Johns Hopkins
- Información sobre el Coronavirus del Ministerio de Sanidad de España
- Preguntas y respuestas del Coronavirus en la OMS.
- Datos de Investigaciones y estadísticas Universidad Oxford
- El coronavirus canino.
- Datos sobre el coronavirus de Wuhan.
- ¿Por qué la OMS declaró pandemia a la COVID-19?-BBC.